En esta hora en que millones de manifestantes...

Querido Luis Arias Manzo:

En esta hora en que millones de manifestantes salen a las calles del Cairo, Suez, Alejandría, en Egipto, en Saná o Rabat, en Yemen, pero también se percibe esa efervescencia social que hay en Argelia y Marruecos, las cuales son mostradas por los fluidos de la televisión y sus diarias imágenes, las continuas discusiones de politólogos y panelistas, siento mis simpatías y solidaridad por los manifestantes -sobre todo por la juventud- que ha salido a protestar y a luchar en las calles y las plazas, contra los regímenes dictatoriales impuestos por las potencias imperialistas.

Siento alegría de como las juventudes y los hombres maduros y las mujeres se motivan en esa lucha y se dan aliento con sus cantos y oraciones, aunque también observo como los Estados Unidos y Europa, los centros de poder imperialistas, están intentando un nuevo cambio de peón en Egipto y buscan los caminos de una reforma -o el lavado de cara- , para no perder todo su dominio económico político y militar sobre esas grandes zonas del norte de África.

Como nos damos cuenta, estos ejemplos en estos países hermanos postergados en la pobreza, el sufrimiento, la tortura, el terror y la cárcel es remecido por los vientos libertarios de millones de jóvenes que se identifican con otros destinos mejores. Con ello nos queda demostrado el cinismo de las potencias imperialistas de apoyar a los regímenes dictatoriales para defender solamente sus intereses nefastos.

Lo que muestran las cámaras al mundo entero, no tiene nada que ver con la democracia y los derechos humanos, con la libertad, que es siempre pregomada por los euroamericanos, sino tiene que ver con gobiernos de bandidos y dictadores criminales, con déspotas y generales que han hecho una fortuna, negociando y traicionando los intereses de sus pueblos.

Querido Luis, esta hora también me dice, que hay que levantar la poesía en la estrella más alta de la dignidad de esos pueblos, en el reconocimiento hacia sus bemoles combativos, en la solidaridad y la identificación del camino hacia la verdadera libertad que ellos buscan.


Poesías de Arte Regresivo

Torsos de la historia


Mubarak tiene algo de Bush padre
y de Bush hijo, pues fueron cómplices de la guerra;
tal vez, antes fue Mubarak el siamés
de Richard Nixon o de su otro hermano Reagan.
Mitad y mitad forman el culo del mundo,
la geografía de la pobreza, el estupor de la muerte.
Mitad y mitad forman la pestilencia
y el excremento para la idea de cinismo.

La historia no se puede repetir
de igual manera,
pero uno puede asociar una y otra forma de muerte
venida del cinismo.
Los hechos pueden identificar y diferenciar
los tiempos de pobreza y los de gloria,
el hacha, la guillotina, la bala, la bomba,
al soldado del pueblo y al general traidor.

No tan lejos quedan los recuerdos
sobre Hiroshima y Nagasaki
y de Trumann el más grande asesino de la historia.
No tan lejos queda las huellas de Vietnám
y el napalm calcinante sobre los cuerpos de los niños.
No tan lejos queda la boda de los saurios coloniales
para la invasión de Argelia y de África del sur,
la muerte de Lumumba y el derrocamiento de Zelaya.

Quien en un segundo pulverizó
más de cien mil vidas en el hongo nuclear
no tiene el derecho
a proclamar la libertad.
Quien negocia con armas
para que los pueblos hermanos se maten
no tiene el derecho
de hablar sobre el mismo derecho humano.

Bizarros como otros, son también los Carter,
los Clinton, los Obama,
quienes mantienen prisiones de tortura en Guantánamo,
cercan altos muros con alambres de púas,
y bombardean los pueblos en nombre de la “libertad”.




Polifemo- USA,
robotérico o cibor o rambo,
cuerpo de tubos de metal,
manos de vanadio o de titán,
tu asalto hecho para la geopolítica,
tus ojos de gorgona programados,
tu acero y tu láser letal.
Polifemo- USA,
pirotécnico, pirodinámico,
acróbata del “helicóptero apache”,
del hierro de Vulcano y para la tragedia,
sin sensibilidad ni emoción,
sin latidos, uno siquiera, en el corazón,
sin saliva en el paladar, sin sudor,
sin urina ni excremento,
sino pulso de una computadora,
soldado en cables de platino,
programado para el rasante vuelo,
siempre los ojos en la mira del cañón,
siempre en la mira de los cuerpos,
siempre con la mira en las aldeas,
siempre con el disparo sobre las cabezas,
siempre con el uranio de las balas,
siempre con los dedos en la detonación,
siempre con la muerte en cuenta regresiva.
Y arden las carnes en bolas de fuego
y en las lucecitas que ves desde las nubes.

Polifemo- USA,
Montañas de cadáveres habéis apergolado,
niños calcinados para festines de buitres,
huecos negros sobre la Tierra que podrían ser los de la Luna,
la mugre y la chatarra leguas a la redonda,
la topografía del terror sobre el planeta.
Tu espada es sanguinaria, tu espada es cruel,
pues eres:
más desalmado que cualquier centauro,
más perverso que Saturno en el tragarse a sus hijos,
y más homúnculo que el más vil de todos ellos.

Pero el chiclero general, que habla, que tu proeza
es defender la “paz” euroamericana,
no te dice que su razón es astuta,
y que ve con el ojo de cíclope las cosas.
Su libertad es poner decenas de militares
y dictadores y cientos de lobbystas por la tierra,
y después de armarlos hasta los dientes,
hablarnos sobre los “derechos humanos”.


José Pablo Quevedo, Embajador de Poetas del Mundo en Alemania